Juan de Sande en Apertura Madrid

Juan de Sande (Madrid, 1965) presenta su próxima exposición en la galería Proyecto H con el título Es natural desear un poco de luz. Capítulo primero, muestra su nueva línea de trabajo centrado en la luz y que supone un cambio de registro frente a sus producciones anteriores.

Para entender la obra de Sande hay que saber que estamos ante un sistema de representación doble pues sus fotografías no solo son el reflejo de lo que capta la cámara sino también de la intervención del fotógrafo en la realidad objetual.

Esta dimensión dual y procesual, que existe en toda la obra de Sande, ha cobrado centralidad en esta última serie dedicada a la luz. Las imágenes son el resultado final de un proceso intelectual, físico y técnico que se desarrolla en el espacio y en el tiempo. El fotógrafo está tanto detrás como delante del objetivo, está ahí, físicamente, de manera que lo que capta la cámara es una acción del fotógrafo que en cierta forma se convierte en sujeto elíptico del relato.

Esta exposición supondrá, en apariencia, un cambio radical con respecto a las imágenes a las que el autor nos tenía acostumbrado. Sin embargo, en el fondo subyace la misma preocupación que le ha movido a fotografiar desde sus inicios en los años 90. Puesto que, como el mismo Sande escribe en su texto para la exposición, “no es extraño que un autor cuyo medio principal es la fotografía se interese por la luz. ¿Qué es si no la fotografía?”.

De hecho, el reto de trabajar con la luz está presente en trabajos anteriores, como En sombra en nada (2005-2008), en el que aplicaba a la naturaleza estudios de luz que antes había utilizado para objetos en el estudio. Pues en todo caso, la luz ha sido siempre una de las herramientas de las que se ha valido para fotografiar. Por otro lado, el aspecto procesual (la huella de la intervención del artista) también procede de trabajos anteriores como Punto de vista imposible (2003-2005) o Y que los salmones canten por las calles (2014).

Esta nueva serie que ahora presentamos es el resultado de dos años de trabajo y, como dice el propio autor “un paso más en mi interés en el medio fotográfico como tema de trabajo”, de ahí que suponga el “capítulo primero” de su práctica presente y futura.

Es natural desear algo de luz tiene la intención de “ir un poco más allá” del uso convencional de la luz que hacen los fotógrafos. Sande ha prescindido en este trabajo de la luz “encontrada”, es decir, aquella que se descubre en las diferentes localizaciones, para centrarse en la luz “creada”, aquella que se genera mediante proyector. Por ello, toda la serie está íntegramente realizada en el estudio.

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Arsfundum.1984

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